Concurso para el nuevo edificio del mercado de abastos y centro multiusos en Sanxenxo, 2020.
Estado
Proyecto
Proyectista
Miguel Monteagudo Pazo
Colaboradores
Eduardo Obach, Sheila García, Rebeca Juncal
Promotor
Concello de Sanxenxo
Memoria descriptiva
“Ágora: término por el que se designaba en la Antigua Grecia a la plaza de las ciudades-estado o “polis”, donde giraba la vida económica (mercado), social, cultural y política de los ciudadanos. El ágora estaba rodeada de los edificios privados y públicos más importantes: Stoa (galerías, pórticos), pritaneos (oficinas administrativas), Bouleterión (edificio para las reuniones de la Boulé), alestras (gimnasio), Odeón (acontecimientos musicales, canto, poesía), altares, templos, etc….” Éste será el punto de partida para desarrollar nuestra propuesta p ara el NUEVO EDIFICIO PARA MERCADO DE ABASTOS, APARCAMIENTO PÚBLICO Y CENTRO MULTIUSOS DEL CONCELLO DE SANXENXO.
Se pretende generar una pieza urbana que se convierta en referente económico, social y cultural para los ciudadanos, que debe resolver de manera atractiva un programa heterogéneo en el que conviven usos comerciales, culturales, administrativos, de reunión, ocio, etc… y que, además, debe ayudar a mejorar su entorno inmediato. El nuevo edificio aspira a convertirse en lugar de encuentro, entorno al cual se desarrollan diversas actividades, a modo de ágora del S XXI, cuyo espacio central vertebrador aquí se configura como una plaza cubierta y abierta a todos, intercalada entre el mercado (motor económico) y el centro cívico (motor social), solucionando con naturalidad la conexión entre el callejón de c/ Progreso (cota superior) y la c/Madrid (cota inferior). Esta plaza central, concebida como un vacío sobre el que gravita el volumen superior, sirve de rótula entre los diferentes usos del edificio y posibilita la celebración de eventos al aire libre. El mercado actúa como zócalo, resolviendo la diferencia de niveles entre las calles circundantes. La implantación del edificio responde a la lectura del lugar y busca encajar con naturalidad completando el vacío urbano que parece existir en la actualidad.
En este sentido, la premisa inicial consiste en tapar la medianera trasera de la edificación colindante y mejorar la relación del nuevo edificio con el callejón de c/Progreso, permitiendo una nueva puerta de entrada al conjunto. La segunda premisa consiste en peatonalizar el carril de circulación que discurre por la fachada principal de c/Madrid, a fin de calmar el tráfico rodado. Se genera de este modo una suerte de plaza pública que dignifica el acceso al mercado y busca darle continuidad peatonal al eje formado por la iglesia, el mercado y el parque situado frente al mar. En esta plaza delantera se situará el acceso al aparcamiento subterráneo que se ubica bajo el mercado, y que posibilita la eliminación del aparcamiento en superficie en todo el entorno inmediato. Se proponen una serie de medidas de eficiencia energética pasivas para reducir las necesidades energéticas de nuestro edifico: Óptima orientación del edificio y sus usos; alta compacidad y fachadas ventiladas con un aislamiento térmico continuo, carpinterías exteriores de altas prestaciones térmicas; ventilación cruzada, elementos textiles tanto en el interior de las fachadas como en la terraza superior; alta hermeticidad reduciendo las pérdidas de energía debidas a infiltraciones de aire. Estas medidas pasivas se complementan con medidas activas utilizando instalaciones con la máxima eficiencia energética de manera que se emplee la menor cantidad posible de energía final para satisfacer el confort de los usuarios.
La propuesta se basa en la estratificación de usos, que pueden desarrollar su actividad de manera independiente o en conjunto, buscando la máxima flexibilidad y versatilidad del conjunto. Los tres grandes usos previstos (aparcamiento, mercado y centro cívico) disponen de accesos independientes que permiten su utilización de manera autónoma, lo que posibilita una mejor gestión y explotación económica de cada uno de ellos.
El aparcamiento dispone de un área reservada para carga y descarga de uso exclusivo para el mercado, prevista de montacargas para la distribución de mercancía al interior. En su distribución se ha primado la obtención de carriles amplios y de fácil maniobrabilidad, que faciliten la circulación. Tiene además entrada y salida de vehículos independiente por la plaza peatonal situada en la fachada principal del edificio.
